Navidad y solidaridad, unidas más allá de una simple rima

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Llegan fechas marcadas en rojo para muchas personas que sufren los terribles envites de la dichosa crisis. Personas que ven como día tras día se les va apagando cada vez más la luz y la persiana cae lentamente sin poder pararla. Personas que han sufrido mucho, que sufren y que, ahora en período navideño y de bienestar, la ilusión y la alegría de años atrás se esfuman por las rendijas del hogar, dejando únicamente lugar al malestar y al pesimismo. Eso es lo que trae consigo la crisis.

Para hacer olvidar por un momento a esa letal palabra, ya sea solo por unos días, Movistar se moviliza por vía informática . A través del famoso juego Apalabrados, y con el simple hecho de introducir en nuestra partida palabras positivas, que son las que tienen que abundar no solo en Navidad sino durante los 365 días del año, estaremos ayudando a familias necesitadas, familias, que como ya he dicho anteriormente, luchan en una batalla predestinada a la derrota, que ven como el 'espíritu navideño' no puede implantarse en su interior. Actuaciones como ésta son las que marcan el sentimiento de compartir, de ayudar, de estar unidos, el 'espíritu navideño'.

Leyendo esta noticia recapacito sobre la situación del país, como ya reflexioné, y todos lo hicimos, en un caso muy similar a este. Rosa Montero apareció impresa en la hoja del examen de Lengua, y no sé a vosotros, pero a mí me hizo pensar, reflexionar, y afloró en mí el sentimiento de compartir, de ayudar, el sentirme bien y ver que los demás se sientan bien, aunque solo sea para sentir el calor navideño.

Además, me sorprende que la iniciativa haya sido idea de una gran compañía telefónica, pues tenemos en mente en todo momento las pautas que rigen para lucrarse de una manera o de otra, y que cuando debatimos sobre temas de unión y de ayuda social, ocupan los últimos puestos en nuestra lista de posibles colaboradores.

Así pues, jugadores usuales de Apalabrados, unamos nuestras letras para formar palabras solidarias y hacer que el color rojo que abunda para muchos en estas fechas navideñas sea sustituido por el verde, el verde esperanza.

Manuel Rodríguez Fuertes